El caso fue denunciado el 5 de junio de 2023, revelando que los abusos ocurrieron durante una década en la localidad de San Rafael del Paraná. Según los antecedentes, los hechos se repitieron de forma continua, lo que agravó la situación de la víctima, quien fue sometida desde temprana edad por su padrastro.

El Tribunal de Sentencia estuvo presidido por la magistrada Nilda Caballero, acompañada por las juezas Diana Arana y Raquel García, quienes dictaron la sentencia conforme a la gravedad de los hechos comprobados durante el juicio oral.

El Ministerio Público había solicitado la pena máxima contemplada para este tipo de delitos, y finalmente el tribunal dictó una condena ejemplar de 20 años de cárcel para el responsable.